domingo, 29 de junio de 2014

Las verdades colectivas

    No hace mucho cayeron en mis manos una serie de escritos económicos de esos que están hechos para que los grandes ignorantes de la economía (como esta que suscribe) nos enteremos de algo. Y es entre esos papeles donde me encontré con la idea de las verdades colectivas que le dan título a mis pensamientos de hoy. Me parece interesante el concepto y muy esclarecedor de todo lo que nos está pasando desde hace unos años. 

   De qué hablo? pues de esas creencias populares sin lógica ninguna que, a fuerza de repetirlas como si fueran un Mantra, y de no plantearnos demasiadas preguntas sobre ellas, acaban pareciéndonos (que no haciéndose) realidad. Es decir, si un número suficiente de incautos se lo creen y se lo repiten constantemente a varios incautos más, los cautos acabarán pensando que son los otros los que tienen razón y lo que a veces parece una mamarrachada terminará siendo una realidad modificada y alterada que todos aceptaremos. Hasta aquí es fácil de comprender,  en el texto, la cosa después se  complicaba cuando la idea se aplicaba a la economía, la teoría de los juegos, de los mercados perfectos e imperfectos, etc. Pero vamos, si les pongo unas cuantas frases como ejemplo de estas verdades colectivas que nos han llevado a todos al huerto, seguro que ustedes también lo entienden:  "la vivienda es una inversión segura porque los pisos nunca bajan". Lo que no sé es si todo el mundo que se compró un piso hace años era consciente de aquella máxima de Antonio Machado que decía que" es de necios confundir valor y precio"...

    Y aquí tienen unas cuantas más: "la economía está recuperándose, lo peor ya ha pasado"; "la Monarquía es necesaria en un país como España, porque es la garante de la convivencia pacífica entre sus ciudadanos" (y yo que pensaba que era la democracia la tal garantía...). "La constitución no se toca": no les suena a aquello de que las Leyes Fundamentales del Reino, que paradójicamente eran de Franco, que no era Rey, no se podían cambiar? La Roja es el mejor equipo del mundo (ya se ve). "Entre 1998 y 2008 España los españoles vivieron el mayor periodo de prosperidad de su historia": ciertamente, antes se compraban una vivienda con un sólo sueldo y una hipoteca a diez años, y en los años del crédito loco hacían falta dos sueldos y una hipoteca a treinta años; y de paso el banco te la metía doblada. 

    Y ahora que lo pienso, ésto de las verdades colectivas tiene un origen antiquísimo, porque se le ocurrio a Moisés, haciendo propaganda de unas tablas escritas en piedra y lo perpetuó San Pablo unos siglos más tarde sentando las bases del Cristianismo, que no deja de ser un invento basado en una creencia que nos conviene a todos...o por lo menos a unos cuantos. Y sigo con un ejemplo menos histórico y menos filosófico: " nadie ha conseguido inventar un aparato como el iPhone": inventarlo puede que no, pero copiarlo y venderlo a mitad de precio sí. Hay que reconocer que el Beato Steven Jobs debió de aprender de San Pablo antes de ponerse a inundar nuestras vidas de cacharros sin los que ya no podemos vivir, con el mérito añadido de que los queramos de su marca y no de otra. 

    Ya no sigo más, porque hay ciertas verdades colectivas que van dirigidas especialmente a los optimistas irredentos entre los cuales me encuentro, simplemente porque creo en la bondad humana y en que el tiempo todo lo pone en su sitio; parece ser que somos los más adecuados para propagarlas. Feliz domingo para todos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario