lunes, 26 de agosto de 2013

Dos años conmigo


   Que se dice bien...Dos años yo escribiendo y, lo que tiene más mérito aún, dos años ustedes leyendo. De aquí en adelante todo lo que ponga sonará a tópico, pero quizás los tópicos también están para mantenerlos, justamente, reiterándolos.

    A día de hoy este blog ha recibido 10.520 visitas, lo cual está muy lejos del número de visitas que recibe Paris Hilton (por ejemplo) pero salvando las distancias, me deja medianamente satisfecha. Soy consciente de que mis mayores seguidores y visitantes son mis amigos, pero como no tengo amigos en la India ni en Rusia, me deja un tanto perpleja que haya casi trescientos visitantes de cada uno de esos dos países. Ya lancé mi botella a la mar sin éxito el año pasado, así que lo intento una vez más: quiénes son ustedes? me podrían dejar un mensaje y contarme cómo han llegado hasta mí? Como soy consciente que no siempre Internet pone las cosas fáciles para dejar comentarios, les propongo que me busquen por mi nombre y apellido en Facebook (estoy) y se identifiquen como lectores de mi blog, prometo contestar a quién así entre en contacto conmigo.

    Voy repasando la lista de entradas de este año y me doy cuenta  de que me repito más que la morcilla, lo cual no se si venderlo como un signo de coherencia con las ideas propias o como una gran prueba de que servidora está al cabo de la calle y de lo que le preocupa a la gente, lo dejo a su elección. Sigo, y me temo que seguiré, dándole vueltas al paso del tiempo, a las huellas que va dejando en nuestro cuerpo serrano, a la tiranía del teléfono móvil, a la incapacidad de los que nos gobiernan, a la importancia de votar, al respeto por el prójimo y sobre todo por su diferencia, a los adolescentes y sus extraños mecanismos de respuesta, a los churros, el jogging y el cine, al ansia de viajar y de pasar más y mejores ratos con mis seres queridos, a la nostalgia de mi infancia, a la familia, a las mujeres de mi quinta, a la España de provincias en la que me crié, a la Europa en la que creí, y a todo lo que por el camino se me vaya ocurriendo, que para eso el blog es mío!

    La entrada triunfadora de este año ha sido "En dos palabras", publicada el 26 de abril y que hablaba sobre el poder adquisitivo y su tiranía sobre las personas. La del año anterior fue "abrazados a la miseria", donde les contaba  las dificultades de llegar a fin de mesde todos aquello que hasta ahora habían vivido despreocupadamente...Es como para pensar que entre mis lectores hay muchos miembros de las organizaciones de consumidores! Otra duda que me corroe.

    Y antes de comenzar el año III de la era "Qué he hecho yo para merecer ésto", como ya hice con el año II que acabamos de dejar atrás, una pequeña declaración de principios, para que no se llamen a engaño: tengo un iPad del que no se ni usar la mitad de sus funciones, un teléfono menos inteligente que yo, dos hijos adolescentes, un marido profesor, soy española de provincias pero vivo en la Europa nórdica y presuntamente civilizada, me gustan los churros y el gazpacho más que nada en la vida, y leo todo lo que tiene letras y cae en mis manos; sigo intentando comprender el porqué de la suma de los días y sigo intentando correr 7 kilómetros en una hora al menos dos veces por semana para que mi cintura no tome dimensiones demasiado esféricas, y sigo pensando que el público que me lee está por encima de quien ésto suscribe, así que seguiré, un año más intentando no defraudarles!

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